4.1 Genética Mendeliana
Sitio: | Moodle ITST |
Curso: | Biología |
Libro: | 4.1 Genética Mendeliana |
Impreso por: | Invitado |
Fecha: | lunes, 28 de abril de 2025, 18:02 |
1. 4.1 Genética Mendeliana
GENÉTICA MENDELIANA
1. Introducción
La genética es el campo de la biología que estudia la herencia biológica que se
transmite de generación en generación. Dentro de ella, la genética mendeliana estudia los
modelos de transmisión de la información independientemente de la naturaleza química del
gen.
2. Conceptos Fundamentales
Gen. Unidad de la herencia que produce la expresión característica observable en un ser
vivo o en sus descendientes. Los genes se disponen a lo largo de las cromátidas de los
cromosomas ocupando una posición determinada llamada locus.
Carácter. Cada uno de los rasgos que se usan en la descripción de los seres vivos. Por
ejemplo: color del iris de los ojos, color del pelo, altura,… Algunos de ellos vienen
determinados genéticamente.
Alelo. Cada una de las variantes génicas que determinan un carácter. Se les representa con
letras mayúsculas o minúsculas, por ejemplo: A o a
Alelo dominante. Aquel que transmite un carácter que se manifiesta siempre. Se le
representa con una letra mayúscula, por ejemplo: A (carácter color amarillo).
Alelo recesivo. Aquel que transmite un carácter que solamente se manifiesta si no está presente el alelo dominante. Se le representa con una letra minúscula correspondiente a la del dominante, por ejemplo: a (carácter color verde).
Genotipo. Dotación genética del individuo para un determinado carácter o conjunto total de genes que tiene un individuo. Por ejemplo: AA, Aa, aa
Fenotipo. Expresión observable determinada por el genotipo, es decir, cada una de las formas posibles del carácter, “lo que se ve”. Por ejemplo: semilla amarilla (genotipos AA y Aa), semilla verde (genotipo aa).
Homocigótico. Individuo que porta en el genotipo dos alelos idénticos para un determinado carácter. Por ejemplo: AA o aa
Heterocigótico. Individuo que porta en el genotipo dos alelos distintos para un determinado carácter. Por ejemplo: Aa
Genoma. Conjunto de genes de una especie, y por lo tanto, de los cromosomas que lo
componen.
3. Leyes de Mendel
A mediados del siglo XIX, Mendel realizó una serie de experimentos con el guisante
(Pisum sativum). Los guisantes presentaban una serie de ventajas: eran baratos y fáciles de
obtener y almacenar, existían muchas variedades distintas y se podían autofecundar o cruzar
obteniendo una gran cantidad de descendientes.
Primera ley de Mendel: ley de la uniformidad
En primer lugar, Mendel obtuvo, por autofecundación de varias generaciones, líneas puras, que eran aquellas en las que un carácter (semillas amarillas, semillas verdes, flores rojas, etc.,…) se conserva a lo largo de varias generaciones sin variación alguna. Estas líneas puras constituyeron la generación parental (P).
Cruzó entonces, por fecundación cruzada, dos líneas puras que diferían en un carácter.
El cruzamiento dio lugar a híbridos que eran todos iguales para el carácter en estudio (color
de la semilla en el ejemplo), pero que eran además iguales a uno de los progenitores. Estos
híbridos constituyeron la primera generación filial (F1).
Mendel explicó este resultado diciendo que una característica (color amarillo) predominaba sobre la otra (color verde), y propuso el término dominante para designar el factor que se manifestaba en el híbrido, y recesivo para referirse al de la variante que permanecía oculto. Y enunció la primera ley o ley de la uniformidad:
“Si se cruzan dos líneas puras que difieren en un carácter, la primera generación filial
es uniforme; y está formada por individuos idénticos que presentan sólo uno de los caracteres
alternativos paternos”.
Si bien Mendel no podía saber qué eran exactamente los factores hereditarios, hoy
podemos explicar la primera ley a la luz de la genética moderna: tomamos el alelo A como
alelo dominante (color amarillo) y el alelo a como recesivo (color verde). Sabiendo que cada
individuo diploide dispone de dos alelos en cada uno de sus cromosomas homólogos, y que
estos se separan se separan tras la formación de los gametos en la meiosis, se deducen tales
resultados.
Segunda ley de Mendel: ley de la segregación
A continuación Mendel autofecundó plantas de la F1 y observó que la descendencia, la
segunda generación filial (F2), no era uniforme, y que la variante del carácter que no aparecía
en la primera generación (el recesivo parental: color verde) reaparecía en la segunda; y
siempre en una relación numérica sencilla: un individuo recesivo (color verde) por cada tres
individuos dominantes (color amarillo).
Y enunció la segunda ley de Mendel o ley de la segregación independiente de los caracteres:
“Los factores que se transmiten de generación en generación se separan (segregan) en
los parentales y se unen al azar en los descendientes para definir las características de los
nuevos individuos”.
Retrocruzamiento o cruzamiento prueba
Si el gen dominante impide la expresión del recesivo ¿cómo se podrá averiguar por
medio de cruzamientos si un individuo cuyo fenotipo corresponde al gen dominante es
homocigótico o heterocigótico? Es decir ¿cómo sabremos si una planta de guisantes amarillos
es AA o Aa?
Para ello se realiza un cruce entre un homocigótico recesivo (aa) con el individuo a
desenmascarar (A_). Si aparecen fenotipos determinados por genes recesivos el individuo
problema es heterocigótico. En caso contrario, es homocigótico.
Tercera ley de Mendel: ley de la segregación independiente
Mendel había estudiado como se transmite un carácter y se preguntó si la herencia de
uno influiría en la de otro carácter. Cruzó dihíbridos, es decir, progenitores que se
diferenciaban en dos caracteres: semillas amarillas y lisas (AABB) con semillas verdes y
rugosas (aabb) y obtuvo los siguientes resultados.
Al sumar las proporciones de los caracteres por separado se mantenía la segregación
fenotípica para un solo carácter (3:1)
Por lo que Mendel concluyó que no hay interferencias entre la herencia de ambos y enunció la tercera ley de Mendel o ley de la segregación independiente:
“Si se consideran dos caracteres simultáneamente, las segregaciones de los factores
genéticos no interfieren entre sí; es decir, los factores que determinan un carácter se heredan
independientemente de los que determinan el otro”.
4. Mendelismo complejo
La herencia de muchos caracteres es muy compleja y no es posible explicarla con la
aplicación directa del principio “un gen, un carácter”. En muchos casos existe una interacción
génica en virtud de la cual ciertos genes interfieren o afectan la expresión de otros, alterando
las proporciones fenotípicas esperadas según las leyes de Mendel. Al conjunto de variaciones
del modelo mendeliano, pero que se basan en él, se le denomina mendelismo complejo.
Herencia intermedia (dominancia intermedia)
Los individuos heterocigóticos presentan un fenotipo intermedio de los fenotipos
parentales. Por ejemplo, el cruzamiento de una planta que presente dos líneas puras de flores
rojas y flores blancas con herencia intermedia dará lugar a una descendencia F1 de flores
rosas. En la F2 la proporción fenotípica será 1:2:1 (rojas, rosas y blancas, respectivamente).
Codominancia
Los dos alelos se manifiestan puesto que ninguno es dominante sobre el otro. El
fenotipo del heterocigótico presenta características de ambos parentales. Por ejemplo, en el
grupo sanguíneo AB0 existen 3 alelos distintos: I
A
, I
B e i. Los individuos del grupo AB son
I
A
I
B ya que ambos alelos son codominantes.
Alelismo múltiple
En la población de una especie existen más de 2 variantes alélicas para un determinado
locus de un gen. Al conjunto de alelos se le denomina serie alélica. Por ejemplo, nuevamente,
el grupo sanguíneo AB0. Existen 3 alelos distintos: I
A
, I
B
e i. Los individuos del grupo A son
homocigóticos I
A
I
A o heterocigóticos I
A
i; los individuos del grupo B son homocigóticos I
B
I
B o
heterocigóticos I
B
i; los individuos AB son heterocigóticos I
A
I
B y los individuos 0 son
homocigóticos ii.
Letalidad
Un alelo es letal cuando su presencia en el genotipo provoca la muerte del individuo
antes de la madurez sexual, o sea, antes de la posibilidad de reproducción y consiguiente
transmisión genética. Un ejemplo es el alelo que determina el color del pelo amarillo (A) en
los ratones. Este alelo es dominante sobre el que determina el color oscuro (a). Al cruzar dos
ratones heterocigóticos amarillos (Aa) las proporciones fenotípicas de F1 son 2:1 (amarillos y
oscuros, respectivamente). Se debe a que el alelo A es letal en homocigosis (AA) y estos
individuos mueren, alterando la proporción fenotípica mendeliana 3:1 esperada.
Epistasia
Consiste en el enmascaramiento del fenotipo correspondiente a un gen, llamado gen
hipostático, por el fenotipo de otro, no alelo del primero, llamado gen epistático. Por ejemplo,
una planta contiene un gen que determina la ausencia de pétalos, cuyo alelo P domina sobre p,
que determina su presencia (P > p). Otro gen determina el color, con un alelo dominante (R),
rojo, y otro alelo recesivo (r), blanco. La proporción fenotípica del cruzamiento PpRr será
12:3:1, alterando las proporciones del principio de combinación independiente (9:3:3:1) de la tercera ley de Mendel dado que no hay pétalos sobre los que pueda actuar el gen del color. El
gen epistático (Pp) enmascara al gen hipostático (Rr).
Ligamiento y recombinación
Dos genes están ligados cuando se sitúan en el mismo cromosoma. En este caso
tienden a heredarse juntos, no segregan independientemente (no se cumple la tercera ley de
Mendel). Por ejemplo, si en un cromosoma se sitúan los alelos AB y en su cromosoma
homólogo los alelos ab, se formarán gametos AB y gametos ab como resultado de la meiosis
(los dos genes están ligados y se heredan juntos). Sólo se formarán gametos Ab y aB si se
produce entrecruzamiento (intercambio de fragmentos de cromosomas homólogos). El
resultado del entrecruzamiento es la recombinación genética, es decir, la formación de nuevas
combinaciones de alelos (Ab y aB). Los gametos que llevan estas nuevas combinaciones se
llaman gametos recombinantes.
Herencia ligada al sexo
Los genes de determinación sexual se localizan en unos cromosomas especiales
llamados cromosomas sexuales. En la especie humana, las hembras tienen 2 cromosomas X
(XX: sexo homogamético) y los varones un cromosoma X y otro Y (XY: sexo
heterogamético). En la hembra, los cromosomas X son homólogos. En el varón, solamente un
pequeño fragmento del Y tiene homología con una parte del X (segmento homólogo) y el
resto carece de ella (segmento diferencial). Los genes situados en el segmento diferencial de
los cromosomas X o Y son genes ligados al sexo (no presentan homólogos).
Estos genes representan una variación del modelo mendeliano, ya que, en el varón, se
expresarán siempre, aunque su alelo sea recesivo. Existen varios tipos de herencia ligada al
sexo:
Herencia dominante ligada al cromosoma X.
Todos los portadores del gen con el alelo dominante expresarán dicho fenotipo. Las
diferencias se perciben en la descendencia según el transmisor de dicha variante alélica sea el
padre o la madre. Un padre enfermo con una enfermedad ligada al cromosoma X transmitirá
su enfermedad a todas sus hijas pero no a sus hijos.
Herencia recesiva ligada al cromosoma X
Los hombres expresarán la variante alélica recesiva del gen siempre que lo tengan
puesto que sólo poseen un cromosoma X. Las mujeres solo lo harán en caso de homocigosis.
Es el caso del daltonismo y de la hemofilia.
Herencia ligada al cromosoma Y
Los caracteres cuyos genes se encuentren situados en el cromosoma Y sólo se
transmiten de varón a varón, es decir, la herencia es holándrica. Es el caso de la ictiosis
(enfermedad cutánea en que la piel se vuelve seca y escamosa) y de la presencia de pelos en
las orejas.
Herencia influida por el sexo
La expresión fenotípica de los genes depende del sexo del portador. En el caso de la
calvicie en el ser humano, el gen actúa como dominante en el varón y como recesivo en la
hembra, es decir, la calvicie está determinada por un par de alelos con variación en la
dominancia.
5. Mutaciones
El material genético puede sufrir cambios de todo tipo, desde la modificación de un
solo eslabón de la cadena de ADN hasta variaciones en el número de juegos cromosómicos.
Se llama mutación, en un sentido amplio, a cualquier cambio genético. Las mutaciones
constituyen la fuente primaria de variabilidad genética que es la base de la evolución. Según
el material genético afectado, las mutaciones se pueden clasificar en dos grupos:
Mutación génica
Un gen cambia por la aparición de un nuevo alelo. Las variantes alélicas han aparecido
precisamente por mutación y afectan como mínimo a un par de nucleótidos (bases
nitrogenadas). Se suelen denominar mutaciones puntuales.
Mutación cromosómica
El cambio se produce en el cromosoma. Si los cromosomas afectados son sexuales, se
llaman mutaciones gonosómicas, y si afectan a resto, mutaciones autosómicas. Existen dos
tipos de mutaciones cromosómicas:
Mutaciones cromosómicas estructurales. El cambio se produce en la estructura del
cromosoma
Mutaciones cromosómicas numéricas. El cambio se produce en el número de cromosomas
El número de cromosomas de un juego se denomina número monoploide . Un
organismo diploide dispone de 2 juegos cromosómicos (2n). La euploidía es una variación
que afecta a todo el juego cromosómico. Un individuo que en lugar de tener 2n cromosomas
(diploide) tiene 3n cromosomas es triploide y sufre de euploidía (poliploidía). Existen casos
de tetraploidía (4n).
Los organismos diploides disponen de un par de cromosomas homólogos, cada uno
procedente de uno de los dos progenitores. La aneuploidía es una variación que afecta al
número de cromosomas. La eliminación de un par de cromosomas homólogos produce
nulisomía (2n-2); si desaparece sólo uno de los cromosomas homólogos produce monosomía
(2n-1), y si aparece un cromosoma extra produce trisomía (2n+1). Existen casos de tetrasomía
(2n+2) y pentasomía (2n+3).